Mina felizmente salió de su casa después de comer algo, eran justo las diez de la mañana y había desayunado tan bien que solo eso la ponía feliz.

Bueno, no solo eso, sino que también ya era viernes y salía hacia la preparatoria de Nayeon y Jeongyeon para sacarlas de esa "horrible cárcel", como decía Sana.

Así que al ver a Sana de pie, recargando su espalda en el auto de Momo y esta misma sacando su cabeza por la ventana la hizo sonreír instantáneamente.

- ¡Satang! - la saludaba de un abrazo que su mejor amiga correspondió sonriendole.

- Señorita Minatozaki - llamaba la señora Myoui desde la puerta haciendo que Sana se pusiera recta como palo y le prestara total atención, aunque Mina juraba verla con manos temblorosas - A las seis en punto la quiero sin ningún rasguño en esta misma puerta acompañada por alguna amiga, ¿estamos? - dirigía su mirada a Momo la cual prefirió sonreírle educada, a ganarse el corazón de las madres, sino ¿cómo sería la amiga ejemplar?

- Sí, señora Myoui. Estará aquí acompañada de alguna de nosotras enterita y bonita como siempre - asentía a la vez con su cabeza. Mina rió y mejor la hizo entrar al auto antes que tenga un ataque de pánico.

- ¡Nos vemos, mamá! - su madre alzó su mano y la despidió a ella con una sonrisa.

- ¡Cuídate, Mina! - este era su hermano el cual salía de atrás de su madre. Mina le sonrió y por fin entró al auto.

- Ay, cómo quisiera tener un hermano o hermana para molestarlo cada que me quiera molestar - suspiraba Momo, la cual venía manejando.

- Él es el único de mi familia que sabe sobre Nayeon - comentaba la menor acomodándose en su asiento - Aunque casi nunca peleamos, es divertido a veces - Momo se quejaba más. 

- Lo bueno, es que tengo a Jeongyeon. Le puedo pegar cuando quiera, y sigue siendo mi amiga - decía sonriendo.

- Porque es igualita a ti, ambas si quieren pelear lo hacen y ya, sin explicación alguna - y era tan cierto que para qué replicarle - Un día de estos se terminaran rompiendo algo.

- Un día me había dislocado la muñeca, ¿eso cuenta? - solo recibió una risa de Sana y una mirada preocupada de Mina.

- ¿A tanto han peleado? - Momo asintió, hasta orgullosa parecía de ser así que Mina le sonrió, igual tampoco le sorprendía tanto, lo debió suponer.

Después de unos minutos de Sana peleando (con palabras, cabe aclarar) con Momo por quien ganaba una pelea amistosa con Nayeon, las tres japonesas llegaron a la preparatoria, haciendo que Mina se emocionará.

- Bien, Mitang... Haz tu mejor actuación y convence a esa profesora de sacar a Jeong y Nayeon de esa tortura llamada clases - Momo le hablaba en susurros como si escondiera algo mientras un guardia le abría la reja solo a Mina y Sana - ¡Eh! ¿Y yo qué, Jordan?

- Perdón, señorita Hirai, pero usted no puede entrar a la institución y casi hacían que la señorita Minatozaki tampoco - explicó el guardia.

- Agh, malditos. Nos vemos en unos minutos - les dijo a las menores que no le hicieron mucho caso; Sana la ignoraba y Mina era arrastrada por Sana - ¿Y cómo vas con tus hijos, Jordan? ¿Ya superaste que uno es provida? - empezó charla con el guardia para distraerse.  

En cambio Mina estaba preocupada por Momo pero Sana la calmó con un 'Momo es amiga de el guardia', y entonces Mina pudo dejar de ser arrastrada y caminar normalmente al lado de la mayor mientras miraba la preparatoria.

Era normal, por así decirlo. La preparatoria de Mina era más arreglada, limpia y todo lo demás pero porque era privada y esta era pública, por lo tanto no eran mucho la modernidad que tenía en la suya, aún así esta linda para gusto de la japonesa menor que nunca había pisado otra preparatoria aparte de la propia.

Incluso muchos eran amigables y le sonreían y saludaban animadamente. Sana decía que le estaban coqueteando pero Mina negaba diciendo que son amables netamente. Mina no sabía qué era coqueteo cuando en su preparatoria no lo había por reglas estrictas.

Afortunadamente llegaron sin nada grave a el aula de último año.

- Bien. Último año. Aquí dentro Mina, escúchame bien... Aquí dentro están los esclavos que son los más torturados de la preparatoria. Esclavos llenos de ordenes y sangre por el esfuerzo que hacen para el siguiente año entrar en una buena universidad, ¡la cual es peor! - exageraba sin ni siquiera saber nada de eso pero pues un poco de drama no viene mal - Ahora sé buena y ayuda a sacar a dos esclavas tontas - dió una palmada en el hombro de la menor.

- Ehhh... Bueno - no sabía si era pregunta o confirmación pero Sana asintió sonriendole. 

La menor tocó la puerta tan finamente que Sana se desesperó, pero aún así guardó silencio mientras esperaba a Myoui hacer magia. Un 'Pase' fue el que aventuró a Mina a abrir solo media puerta y entrar sólo con una paso con una reverencia media que sorprendió a la profesora.

- Buenos días. Perdón por interrumpir su clase, pero en casa necesitan a Im Nayeon y necesito que ella me acompañe, por favor - la voz tan tímida y suave llamó la atención de todos en el aula, totalmente encantados con la linda japonesa que sonreía educadamente a la profesora.

- Oh, ehh... B-Bueno, está bien - incluso la profesora se sentía un tanto abrumada por la educación de la menor que sólo al miraba desconcertada. Mina sonrió aún más por la confirmación, que dejaba a varios y varias atontados con ella - S-Señorita Im, puede retirarse de clase - llamó pero nadie se movió - Señorita Im - volvió a llamar y la mencionada quitó sus audífonos y prestó atención.

- ¿Sí? - se puso recta y miró a la profesora como si no estuviera hace unos segundos perdida en su mundo.

- Señorita Im, se pude retirar. Una señorita llegó por usted por asuntos en su casa - anunció, haciendo que Nayeon llevase su mirada hacia la puerta. Sonrió instantáneamente al notar a su novia.

- Hasta el lunes, profesora Kim - se despedía Nayeon mientras salía del aula y Mina salía después.

- Gracias, profesora. Lamento la interrupción - salía la japonésa despues cerrando la puerta y luego siendo recibida por la carcajada de Sana y un codazo mientras decía entre susurros 'Olvidaste' y luego un 'Jeong', que asustó a Mina ya que recordó a la joven Yoo y nuevamente tocó la puerta recibiendo otro 'Pase' de la profesora que aún no había continuado con su clase por el desconcierto - Profesora, en serio lo lamento pero olvidé que también la señorita Yoo me debe acompañar, por favor - pidió y la profesora no se negó.

Después de todo, es la única que usaba ese tipo de palabras en vocabulario a un adulto en esa preparatoria. Mina sin saberlo tenía atontados a todos en el aula y tampoco es como si le importara, teniendo atontada a Im Nayeon estaba bien.

- Señorita Yoo - llamó pero la coreana enojada ya había aguardado sus cosas en su mochila y se había levantado de su asiento.

- Lamentablemente nos vemos el lunes, perras - se despedía educadamente de todos - Menos a usted profesora Kim. Me cae muy bien. Muy buenas sus clases - ganarse un poco a los profesores no venía mal.

- Lo siento, Jeonggie - se disculpaba la menor - Ahora si puede continuar con su clase, gracias - cerró la puerta con una sonrisa educada en su rostro - Pensé que estarías en otro aula. Pasé desapercibido que Sana me dijo que estaban ambas - y no mentía, en la preparatoria donde asistía con Sana no siempre tenían las mismas clases aún siendo del mismo grado.

- Sólo porque eres Mina, te perdono. Pero estoy enojada y quiero golpear a Momo. ¿Dónde está la idiota esta? - preguntaba por su mejor amiga que extrañamente no estaba causando problemas por ahí.

- No la dejó entrar el guardia - explicó Sana sacando una carcajada de Jeongyeon.

Nayeon ya se había acercado directamente a Mina abrazandola por la espalda y besando su mejilla en forma de saludo.

- No pensé que vendrías - susurró cerca de ella, recibiendo otro susurro de la menor.

- Lo siento, se me olvidó avisarles ese día - se disculpó recibiendo otro beso en la mejilla de su novia - Igual ya estamos aquí y debemos ir a donde Momo, que debe estar esperándonos - se dirigió a Sana la cual inflaba sus mejillas queriendo chillar por al anterior escena. Jeongyeon sólo las miraba con una sonrisa.

- Sí, vamos antes de que se cojan en el pasillo - "susurró" Jeongyeon a Sana luego corriendo porque extrañamente Nayeon la perseguía con el rostro sonrojado. Mina agachó su cabeza mientras escondía su sonrojo entre sus cabellos.

Nayeon notó a Mina muy callada y al darse cuenta de lo avergonzada que estaba, decidió dejar a Yoo en paz y abrazarla contra su pecho. 

- Vamos, Minari - la tomaba de la mano para salir de la preparatoria, junto a Jeongyeon que mejor comenzó a discutir con Sana si el helado de chocolate era mejor que el de vainilla, obviamente ganó Sana al amenazarla con un beso que obviamente no daría porque tenía novia pero calló a Jeongyeon.

Esta vez cualquiera de los estudiantes "amables" ni se acercó por la mano posesiva de Nayeon en la cadera de Mina. Jeongyeon rió por lo espantados que se veían y Sana solo se burló de Mina.

- ¡Te dije que no eran amables! - y Mina le dió la razón para no empezar a pelear, prefería perderse en su mundo con Nayeon que pelear por si las personas eran amables o coquetas. 

Suspiró y sonrió encantada por la cercanía que Nayeon tenía hacia ella. Le gustaba mucho más que se pueda hacer eso en un lugar público, sin temer a ser descubiertas porque nadie las conocía.

- Te amo, Yeonnie - la voz dulce de su novia distrajo a Nayeon, quien le daba las peores miradas a una chica que saludó "amigablemente" a Mina.

- Yo también te amo, Minari - sonrió cuando Mina se escondió en su pecho.

Sana no se contuvo y chilló que Mina creyó que hasta su madre la escuchó.

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Tan bonitas